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Aclaración: Este libro ES UNA UCRONÍA (Subgénero de la ciencia ficción). está basado en varios hechos reales pero desconectados entre si (Y absolutamente TODOS LOS NOMBRES Y PALABRAS DE LA JERGA FUERON CAMBIADOS, por la seguridad de todos los implicados, y para que el que escribe este libro NO VAYA A PRISIÓN). Sólo la genialidad magistral del autor los ha unido en un solo relato coherente. Este libro NO refleja las opiniones personales del autor: solamente pone los diálogos en personajes criminales y malignos, por lo tanto NO es apología ni al fascismo, ni al crimen organizado. NO PROMUEVE LA MALDAD, ni la discriminación a ningún sector mayoritario o minoritario, étnico, religioso, de género, preferencia sexual o de ninguna nacionalidad.
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¡ADVERTENCIA!
Este libro contiene violencia extrema, asesinatos, lenguaje demasiado
explícito, consumo de drogas, y ambiente sumamente hostil
Así que cada día, durante una semana, Ian el humillado -y por lo tanto humilde- estuvo barriendo, trapeando y quitando las manchas del taller de la prisión, mientras era visitado por el Sensei Pérez, quién tomaba también una escoba o un trapeador y le ayudaba a limpiar mientras le impartía de sus enseñanzas…
“¿Por qué se pone el Sensei a hacer lo mismo que un wey humillado como yo?”
“Porque precisamente es un trabajo honrado lo que dignifica al hombre. Para salir de la humillación, un dizque hombre ha de trabajar, en lo que sea, esforzarse, entre otras cosas, para llegar a ser un hombre de verdad: después podrá convertirse en algo superior a un simple hombre, pero el camino pasa necesariamente por el trabajo…”
“Usted habla como un padre, verdaderamente es un Sensei. Ojalá y hubiera vivido más mi padre, porque pienso que hubiera sido como usted…”
“Pero te lo arrebató la migra, y ya no lo volvistes a ver ¿Y sabes por qué? Porque al régimen de Epic le conviene que personas como tú o como yo crezcan sin un padre.”
“¿Cómo está eso? ¿Le conviene al régimen? ¿Lo hace adrede?”
“No sé hasta qué punto lo hace adrede. Pienso que lo hace como costumbre, porque así se enseñó a sobrevivir este régimen. Si te pego un chingazo en la rodilla, tu pie me va a dar una patada, es normal, es un reflejo, bueno, pues así el régimen reacciona como con un reflejo involuntario ante un chingazo en la rodilla, y nosotros, los Latinos inmigrantes, así como los Negros y los Muslims somos el chingazo en la rodilla del régimen de Chrystalia.”
“¿Pero por qué le conviene al régimen que nos quedemos sin padre?”
“Porque una raza sin un padre es una raza con una familia incompleta. Y cuando la familia está incompleta, la madre tiene que esforzarse al doble para cumplir al mínimo el deber de una familia, pero casi nunca le alcanza para cumplir, por eso muchos homies terminamos aquí, encerrados, drogándonos y llenando de mierda nuestra vida.
¿Qué es eso de “Perdóneme madrecita por esta vida loca”? ¿Acaso no es repetir la misma estupidez que nuestros padres? Muchos vatos se unen a las pandillas porque entre otras cosas crecieron sin un padre, o el padre que tuvieron los golpeaba, o golpeaba a su madre, o porque era un pinche vicioso: ¿Por qué chingados entonces ellos se vuelven viciosos, borrachos, golpeadores y mujeriegos?
¿Por qué repiten de lo que tanto se quejan? Te diré por qué: porque cuando alguien se queja de males que luego repite, está lloriqueando ¿Y por qué lloriquea? Porque es un puto llorón, un maricón, alguien sin dignidad ni huevos. Y ser maricones sin huevos es el reflejo del régimen contra los migrantes y los hijos de los migrantes: el régimen te quiere ver maricón, llorón, haciendo las mismas cosas de las que lloras como un putito, así es, el régimen te quiere ver drogándote, teniendo hijos como un maldito conejo y luego huyendo por tener falta de huevos, pues de este modo el régimen se asegura de que no seas peligroso para él mismo, sólo para las personas, pero incluso para ese peligro está el CMI para detenerte y mandarte para acá.
Al régimen le conviene convertirte así en un criminal maricón, un criminal sin propósito más que el de drogarte y tener dinero, un criminal ignorante. Le interesa que diciéndote “defender la raza” luego traiciones a los tuyos sólo por hacer más dinero, volviéndote doblemente maricón. Así es: le conviene que seas maricón, y dos veces, sin propósito, vicioso, ignorante, pendejo y culón cobarde pues así le muestra a los ciudadanos: <<¡Miren! Así son los Miztlecos que llegan a epic, no muy diferentes que los otros Latinos, o que los negros, asiáticos y muslims: son sólo adictos sin dignidad, seres inferiores a los buenos ciudadanos Crystalenos.>>”
“¿Y acaso no le conviene al régimen que ustedes sean llamados pedófilos y violadores de niños?”
“¡Esa es la parte más graciosa! Porque no es el régimen mismo el que empezó los rumores morbosos de que nosotros éramos pedófilos: ¡Fue la pandilla de los Miztalokos la que lo inició! Jajajajaja así es, y te diré por qué hijo: la Southeast nos tiene miedo, miedo y envidia, porque hemos crecido demasiado en unos pocos años, y porque casi no hacemos movimientos llamativos, casi no peleamos batallas, ni matamos a mucha gente. La piñata y el canto de las ranas que vistes fue una acción después de muchos meses de no matar a nadie. Pero cada una de esas acciones, nos aseguramos de que sea tremendamente efectiva, como una bala que atraviesa un cráneo ¡PLUSHHH! La bala es tan pequeña, no se compara a un bate de baseball grande y desmadrozo ¡Pero hace muchísimo más daño! Pues así son nuestras movidas, nuestros ajustes, son pequeños, son pocos ¡Pero son más efectivos que una bala! Porque nuestras movidas no son mirando pa´ destruir, no: nuestras movidas construyen, y ligan más de lo que matan.
¿Sabes por qué más nos envidian los Miztalokos? ¡Porque nosotros si tenemos HONOR! Y ellos no saben ni tienen puta idea de lo que es eso. Pero tienes la oportunidad de seguir aprendiendo sobre el honor mientras te lo vas ganando. Pero eso es todo por hoy. En un rato más vienen algunos hermanos para jugar al Póker. Únetenos si quieres, claro que no podrás apostar, nosotros no permitimos pendejadas en nuestra hermandad, pero puedes relajarte un poco después de tanto trapear y limpiar manchas, que dices ¿Jugamos?”
“Está bien Sensei, aunque sin apostar nada, no tiene mucho chiste, pero le entro al juego…”
“Muy bien perra: mañana te hablaré sobre los hermanos, los Torex.”
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Este capítulo es parte del libro: La Caja de los Grillos
(Lo puedes descargar en este enlace)
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