El oscurantismo inminente: las consecuencias de un mundo sin petróleo.

Palabras clave: civilización, fin, análisis, artículos, energía, colapso, inminente, epidemia, pandemia.

    En la primera parte del artículo, llamado "El fin de la era del petróleo" hablé del agotamiento inminente de la extracción del crudo, pues el consumo y la demanda no sólo de energéticos, sino también de productos derivados ha aumentado exponencialmente a un grado que hace imposible a la civilización actual subsistir sin todos aquellos derivados.

    Mientras tanto, en todo el mundo se crean grandes fondos financieros de ahorro e inversión. Tomemos como ejemplo a Italia, y un hipotético (pero muy posible) fondo que ya haya creado.

    Pero ni todos los fondos del mundo pueden evitar el aumento exponencial de consumo de los seres humanos, como en la analogía de las hormigas que mencioné anteriormente:

    Supongamos que en un desierto casi absoluto hay un oasis extenso, aislado  cerca del lecho de un río seco. Este oasis lleno de árboles frutales tiene la capacidad de albergar y alimentar a casi dos y medio trillones de hormigas simultáneamente, pero en ese lugar no hay ninguna hormiga. Sin embargo, al sur, en las regiones tropicales, un año especialmente caluroso propicio un superhuracán, cuya colilla de nubes llegó hasta el desierto, y llovió torrencialmente, llenando ese lecho del rio, y trayendo objetos flotantes que se quedaron desperdigados alrededor del lecho del rio.

    Uno de esos objetos era un tronco lleno de hormigas muertas, excepto la hormiga reina sobreviviente y un macho, los cuales sobrevivieron en ese oasis, libre de otros insectos depredadores que las podrían cazar, controlando así su población..

    El primer año habían dos especímenes de esa especie de hormigas, alimentándose de los dulces frutos del gran oasis. El segundo año habían cuatro hormigas, el tercer año ocho… el décimo año hay más de mil.

    El año veinte hay más de un millón, el año treinta hay mil millones, etc… lo que nos lleva a que el año 58 hay casi trescientos mil billones de hormigas: algunas hormigas han desarrollado cierta inteligencia y se dan cuenta que el año sesenta superarán el trillón de hormigas, y si contáramos lo que estas han consumido a lo largo de las sesenta generaciones, terminan por agotar toda la fruta que haya.

    ¿Cómo pueden ser tan pesimistas esas hormigas si a 2 años del supuesto “agotamiento”, solo han consumido la cuarta parte de todos los alimentos existentes en ese oasis? Porque el siguiente año, al duplicarse la población: consumirán la mitad de lo que queda, y al siguiente lo habrán consumido todo (recordemos que la población de la analogía se duplica). Por ello durante ese año envían a las hormigas con alas para explorar otros oasis en el desierto, y luego de una ardua jornada se han descubierto 3 oasis más del mismo tamaño.

    El año 59 ya han consumido la mitad de lo que existe, y las hormigas toman consciencia por lo que se alegran de que hay 3 oasis que contienen recursos para consumir todo lo que cincuentaynueve generaciones de la población habían consumido en toda su historia ¡Y se sienten felices! A pesar de que las hormigas más listas les dicen que deben encontrar más oasis y deben limitar su población ¿Para que hacer eso?

    Por ello en el año sesenta ya han agotado todos los frutos, y las hojas de los árboles, y aún la savia, por lo que los árboles se secan y mueren, pero estos esforzados insectos emprenden un éxodo masivo gastando toda la reserva de energía que tienen, hasta llegar a los dos oasis, pues han duplicado su población en un año.

    Los dos oasis forman el doble de todo lo consumido en toda su historia en el agotado oasis, pero estas hormigas agotan en una generación el doble de lo que habían agotado en 20 generaciones previas. En ese año descubrieron 2 oasis más, por lo que en el año sesentaydos han ocupado tres oasis… Una población que debía ocupar 4 oasis para subsistir, por lo que mueren casi dos y medio trillones de hormigas en un año, y las otras se duplican al siguiente y mueren.

(En el mundo no hay recursos para tantas personas como en cada uno de esos oasis para las hormigas.)

    Si aplicamos la misma analogía, pronto, en un año la humanidad consumirá el equivalente en derivados del petróleo que habían consumido en toda su historia.

    Por ello es necesario unir al hipotético fondo nacional Italiano a su vecino y socio Francia.

    Mientras el consumo siga aumentando peligrosamente, pues estos financieros prevén un futuro nada favorable a la economía petrodependiente.

    Con la adhesión de Alemania ya se ve que el centro de Europa se interesa por ese fondo común.

      Pero la inversión (o futura des-inversión) de recursos financieros para la extracción no es sólo parte del problema que se viene, tampoco lo es sólo extraer energía invirtiendo energía, es también invertir energía para transportar y ensamblar INFRAESTRUCTURA GENERADORA DE ENERGÍA, es decir:

    ¿De que servirían las toneladas de petróleo que todavía quedan sin las complejas plataformas petrolíferas, refinerías, líneas de transporte energético, plantas procesadoras, etc… construidas con máquinas específicas, materiales especiales, energía, trabajo y tiempo requerido?

    Desde 1860 hasta 1920 se desarrolló la infraestructura generadora de energía fósil, es decir, la que permite convertir de un pantano subterráneo negro de densa brea en todos los productos derivados del petróleo, que conocemos y de los cuales muchos no nos damos cuenta que vienen del crudo.

  Entonces es natural que con el “bajo” nivel tecnológico de 1860, tomaran 60 años para desarrollarse las infraestructuras generadoras de energía, hasta que en 1920 varios países centrales pudieran proveerse de energía y tecnologías a cantidades industriales. Pero tal es el desarrollo tecnológico e infraestructural actual que si quisiéramos implementar una nueva infraestructura a nivel mundial para generar energía de otras fuentes (solar por ejemplo), sólo nos tomaría 20 años implementar esa transición.

    Pero, se implemente la infraestrucura energética necesaria o no, al menos al fondo de Centroeuropa se pueden unir los países limítrofes entre Francia y Alemania: Bélgica, Holanda, Suiza, Baviera, etc… así como los países eslavos al este de Alemania.

    Es cierto, sólo nos tomarían 20 años implementar la infraestructura de energías alternativas, si se cumplen estas condiciones facilísimas de resolver:

1.- Una sola energía alternativa no puede suplir el suministro energético del petróleo, por lo que se necesita una suma de todas las energías alternativas: solar, eólica, marina, vapor de agua, etanol, etc…

2.- Si los presidentes y primeros ministros de los países más poderosos del mundo son capaces de pasar por encima de sus cabilderos de las empresas petroleras, bancos, grupos financieros, consorcios de medios de comunicación, consorcios empresariales beneficiados por los anteriores, etc… cabilderos que los llevaron al poder al financiar sus campañas y que son capaces de matarlos como lo hicieron con Kennedy. Estos mandatarios tendrían que ser de estos países: U.S.A., Australia, Japón, Corea del Sur, China, India, Rusia, Arabia Saudí, Suecia, Israel, Finlandia, Egipto, Noruega, Sudáfrica, Dinamarca, Alemania, Reino Unido, Brasil, Chile, y Uruguay.

3.- Si al ser capaces todos ellos, y en la misma década (esta), de tomar decisiones de estadista y no de títere, se pusieran de acuerdo todos ellos de la necesidad de cambiar al petróleo por una suma de energías alternativas, cosa que nunca ha pasado en toda la historia, ni sobre el tema de las energías, ni que mandatarios de esos países se pongan todos de acuerdo.

4.- Que creen una agenda de implementación urgente, con el objetivo de implementar la transición energética mencionada, que tomaría 20 años de llevarse a cabo.

5.- Que convenzan a los mandatarios de países siervos de impulsar esa agenda común, por lo que casi todos los países del mundo tendrían mandatarios con esa agenda energética.

6.- Que coordinadamente logren convencer a sus congresos de aprobar leyes destinadas a cumplir esa agenda, logrando derrotar a sus opositores políticos.

7.- Que los cabilderos de los consorcios empresariales no se les pongan en contra ni busquen matarlos o subyugarlos de nuevo a la obediencia servil.

8.- Que esos políticos valientes, visionarios como no se había visto desde el siglo XIX, puestos todos de acuerdo por primera vez en la historia, victoriosos ante la oposición política, victoriosos ante los cabilderos de los consorcios, logren implementar esas medidas de transición energética destinando todo el petróleo disponible para impulsar las máquinas que construirán esa infraestructura mundial durante 20 años, y así DURANTE 20 AÑOS NADIE PODAMOS USAR NI GASOLINA NI ELECTRICIDAD, NI GRAN PARTE DE LOS DERIVADOS PARA NUESTRO ANTERIOR ESTILO DE VIDA INDIVIDUAL Y CONSUMISTA.

9.- Que la gente estuviera conforme con que de golpe perdiera todos los lujos y comodidades que más de uno tiene: luz eléctrica, transporte público y privado, televisión, radio, internet, celulares, teléfono, etc…

10.- Que no se unieran los perjudicadísimos consorcios empresariales, petroleros, bancarios y de medios de comunicación a un pueblo desesperado por el estilo de vida perdido, y alentado por los líderes religiosos, en contra de los “dictatoriales e injustos gobiernos estatistas”.

11.- Que durante esos 20 años no se acabe el petróleo, es decir, que el suministro de petróleo dure al menos hasta el año 2038 (a 100 años de la expropiación petrolera Mexicana).

    Así que solamente se necesitan cumplir esas 11 condiciones para implementar una transición energética de 20 años que permita reemplazar el total del suministro que ahora nos da el petróleo. ¡Cosa más fácil!

(Es más fácil que pase esto: ...

Que esto: ...

    Pero mientras eso pase, es todavía más fácil que Rusia se una al fondo Europeo común, así como Reino Unido.

    Estos arreglos financieros se dan por arriba en los países Europeos, pero la gente común, algunos sectores grandes en Europa, y la inmensa mayoría en Latinoamérica estamos formados por personas fanatizables. Somos la inmensa mayoría, pero no nos damos cuenta, pues somos grupos dispersos. ¿En que me baso para decir que como “clase baja” o “proletariado” somos fanatizables? Basta con que transmitan en los medios algún desastre natural, disturbios, una guerra, etc… para que salga la clásica tía hipercatólica, o primo protestante a decir “Estos desastres pasan, porque hemos sacado a Dios de las instituciones”, es decir, ni siquiera tiene que pasarles algo personal para que comiencen a renegar del estado laico.

    Mientras que arriba Rusia llama a su vecino China para unirse al gran fondo común, que ya no sólo es Europeo.

    Este fondo invertirá a futuro en la extracción de petróleo, pues es tan importante para mantener aceitada y funcional a la monstruosa máquina llamada civilización, ya que los derivados del petróleo se utilizan en:

1.- Combustible para tanques y aviones de guerra,

2.- medicamentos sintéticos,

3.- fertilizantes que propician el rendimiento agrícola moderno, indispensable para alimentar a dos tercios de la humanidad,

4.- varios materiales de computación,

5.- material sintético indispensable para la tecnología,

6.- Gasolina, diésel, gas avión, no sólo para el transporte de particulares, SINO PARA EL TRANSPORTE DE ALIMENTOS A CIUDADES ENTERAS, que crecen insosteniblemente en áreas como desiertos o zonas demasiado frías para la agricultura.

7.- Productos sintéticos como telas, plástico y polímeros que componen el 80% de todos los productos de consumo, con el nivel mundial de empleos que eso conlleva.

9.- Aceites sintéticos en cantidades industriales que son indispensables para el mantenimiento de la maquinaria de plantas hidroeléctricas, sin los cuales, tarde o temprano esas máquinas se incendian, interrumpiendo el suministro eléctrico de provincias enteras. Sin las comunicaciones basadas en suministro eléctrico ni el transporte basado en gasolina o similares, todo control gubernamental de un país que sea un poco mayor a Bélgica se vuelve inviable por al menos 10 años.

 

    Por ello es tan importante invertir en la extracción del crudo, que el Reino unido hace que se unan todos sus países socios del Commonwealth, mientras que el frente Europeo de fondos hace que se una la unión Europea completa. En el frente Chino se une el resto de los BRICS (Brasil, India y Sudáfrica), así como el vecino global que tienen tanto los BRICS, como la Commonwealth y la Unión Europea: U.S.A.

    Los financieros de este fondo (prácticamente casi todo el mundo) acuerdan una oleada final de privatizaciones, pues este fondo global debe de ser llenado, y para eso tendrán que echar mano también de los recursos públicos de sus respectivos países, destinados a la sanidad, educación y programas sociales de vivienda y alimentos.

    Mientras que uno de los 4 miembros más poderosos: U.S.A. hace que entren sus socios del tratado de libre comercio: Canadá y México, para el fondo global común.

    Es entonces cuando la oleada de privatizaciones finales comenzará a impulsarse en todo el mundo, y nuevamente pocos sectores protestarán por esto.

    En los países donde los partidos Neoliberales gobiernan no será tan difícil que los SUMISOS políticos que tienen mayoría aprueben las “nuevas reformas estructurales decisivas”, pero en las naciones donde tienen disputada su mayoría o no la tienen se crearán “comisiones reformistas” que aprueben todas esas privatizaciones sin necesitar la mayoría en las cámaras. Un ejemplo de eso lo vimos en mi país, en el mal llamado “pacto por México”. Sin embargo los políticos de oposición a esas privatizaciones incitarán a las protestas, así como aquí se opusieron López Obrador, Fernandez Noroña, Javier Corral y otros.

    Tanto como mayoría, o como comisión, los políticos Neoliberales lograrán las privatizaciones de formas demagógicas o antidemocráticas, causando que las protestas crezcan al doble.

    Por ello es que se aprobará al mismo tiempo, o antes, mediante esas comisiones antidemocráticas: un nuevo paquete de leyes que legalicen la represión de protestas mediante eufemismos cómo “prevención y lucha contra el terrorismo.” Mientras que las protestas seguirán aumentando, aunque no se generalizarán… todavía.

    Una vez privatizados los sectores, los empleados desde los mandos medios hacia abajo serán “movilizados” con liquidaciones ridículas (mientras los de más arriba recibirán sustanciosas liquidaciones –lease sobornos- para ser sumisos, unirse a la corriente privatizadora o mantenerse al margen). Así la gente se quedará casi de golpe sin servicios públicos de salud, educación, vivienda o programas sociales para los más necesitados.

    Cómo es de esperarse, los sindicatos y gremios de los trabajadores del sector público protestarán, pero serán desalojados por la fuerza mediante medidas “antiterroristas”. Por todo esto es que las protestas casi se generalizarán.

   Una vez desalojados, y consumada la acción, todos los que recibían un buen o precario servicio de educación, sanidad, vivienda y programas sociales, de pronto se verán desamparados, se darán cuenta del gran robo, y se unirán a las protestas. Esta vez las protestas serán generalizadas. ¿Será que se cumplirán las visiones de una “revolución mundial proletaria” como la soñaban los rojillos?

    Posíblemente NO suceda eso pues el paquete de leyes “de seguridad antiterrorista” permitirá legalmente que se impongan rápidos y sangrientos estados de excepción que rompan mediante la violencia o “medidas antiterroristas” la generalización de las protestas, convirtiéndolas en grandes grupos separados pero descoordinados.

    Todos los recursos estatales extraidos de los presupuestos públicos de todas las naciones afiliadas serán desplazados hacia el sector financiero pues ESE ERA EL PLAN: necesitan invertir desesperadamente en la búsqueda, descubrimiento, construcción y extracción de nuevos yacimientos de petróleo, pues “lo hacen por el bien de todos, ¡Hasta de los opositores!”

    La gente más pobre, al ver que su revolución no triunfa rápidamente, comienzan a robar, pues no son gente que haya concientizado mucho (eso es más propio de las clases medias o medio-altas lamentablemente) y cuando el hambre aprieta, la bondad afloja, así que hay que ganarse el pan, hasta robando, saqueando y asaltando.

    Este clima de caos inminente causará una fuga de capitales financieros de varias empresas en todo el mundo, que se irán para invertir en “zonas seguras” convenientemente en fuentes directas de agua, donde se comenzarán a establecer los banqueros, bien protegidos claro está, por fuertes comandos de seguridad privada.

    Mientras que los que protestaban, debido a la fuerte represión, se radicalizarán y usarán la violencia. Al mismo tiempo la escalada de la delincuencia continuará, y la gran mayoría de los países se volverán mucho más violentos.

    Las empresas, al no tener capital (por la fuga) quebrarán, mientras que otras lo harán por falta de ventas e inclusive saqueos y robos tan frecuentes, pues si no hay empleo, no hay dinero para comprar y mucho menos pueden subsistir los negocios cuando la violencia está generalizada.

    El desempleo pues tan generalizado hará estallar el número de saqueos en pueblos y ciudades.

    Es en ese clima de caos triunfante en el que entra el factor FANATISMO, pues en las religiones mayoritarias, sus adeptos están tan desesperados, que el potencial del clero vuelve a dispararse, aunque en esta etapa inicial del caos la mayoría de líderes religiosos aún no saben el potencial que tienen, pues sólo saben que “es el fin del mundo” (más bien de la civilización) y que ya tarde el pueblo ha dejado de ser “tibio a La Palabra”.

    Y todo esto sucede para que el sector financiero mundial invierta todo lo extraído de todo el mundo para sacar más petróleo, más la tasa de retorno energético comienza a bajar.

    Debido a los enfrentamientos entre fuerzas del órden y radicales, a la generalización de la delincuencia, a los saqueos de los negocios que quedan, a la quiebra de casi todos los negocios, a la disminución casi a cero de la demanda de transporte de productos y al clima de inseguridad total es que colapsa el sistema de transporte de productos y alimentos, y con el la economía comienza a colapsar: estamos ya en una crisis tres veces peor que la que se inició en 1929 y cinco veces peor a la del 2008.

  

(Porque todos sabemos que el mejor estilo de vida es el gringo, con su salud física y mental, su sociedad tolerante y abierta, su convivencia pacífica con el mundo, su alta moralidad y sus valores espirituales no materialistas)

    Y en este ambiente de crisis la tasa de retorno energético llega a cero: pues la cantidad de energía invertida en la maquinaria extractora de petróleo es igual a la energía potencial extraída: las máquinas excavan tan profundo y en zonas tan poco energéticamente densas que prácticamente sólo sacan la energía que gastan: ya no hay más entrada de petróleo, y esto (según las mediciones de los estudios geológicos, petroleros, estadísticos, matemáticos y sistémicos) ocurre apenas en el 2029, o más tardar el 2032.

    Para este triplete de años es que el número de muertos se dispara en todo el mundo debido a la delincuencia, los saqueos, la represión y las pequeñas pero multitudinarias rebeliones violentas.

    Mientras que las fuentes directas de agua aumentan en un 1000% su valor, pues en un sistema de transporte colapsado, sólo los alimentos cultivados cerca pueden llegar a la mesa, pero ¡Oh sorpresa! Allí se han establecido los banqueros y ya muchos empresarios, protegidos por un fuerte cinturón de seguridad privada.

    Afuera de estas zonas de subsistencia, son tantos los muertos y tanta la inseguridad que los sistemas sanitarios y funerarios están rebasados y colapsados: la innumerable cantidad de muertos hace estallar epidemias e infecciones: es el regreso de la peste negra.

    Por ello es que se hace necesario que más y más grupos armados tomen el control de las fuentes de agua, no sólo para proteger a las clases privilegiadas (que a esta altura son banqueros, empresarios y políticos en menor medida) sino para poder sobrevivir ellos mismos.

    Afuera las epidemias causan un estado de paranoia en la gente, que por miedo exagerado e irracional comienzan a linchar a todo el diferente como posible agente transmisor de esas enfermedades.

    El caos ya es tan generalizado que los servicios de mantenimiento de las plantas hidroeléctricas son prácticamente inexistentes: estallan los incendios y el suministro de electricidad se vuelve intermitente en todo el mundo.

    Por ello los comunicados gubernamentales anuncian estados de excepción, con suspensión casi total de derechos, pero no saben los gobiernos que emiten esos comunicados, que estas son sus últimas comunicaciones, no sólo globales o internacionales, e inclusive nacionales: son las últimas comunicaciones transprovinciales.

    Mientras tanto todos los que huyen intentan entrar a las zonas de fuentes de agua, pero los grupos armados sólo les permiten entrar a un número limitado ¿Entrar para qué? Pues para cultivar la tierra limitada por esa agua, pues ni los grupos armados ni las clases privilegiadas quieren ensuciarse las manos. Esta nueva clase campesina tiene sus derechos “suspendidos” indefinidamente, pues tiene que aceptar condiciones unilaterales de los que les hacen el favor de entrar.

    Y así los que entran están tan desesperados, que los líderes religiosos que han logrado entrar (de religiones típicas de la zona como puede ser protestantismo, catolicismo, o islam del otro lado del mundo) ven aumentado su poder cuando usan la forma de vida laica y secular como chivo expiatorio que causó el fin del mundo: “todo esto pasó porque sacaron a Dios de las instituciones y a la fé de la vida pública”.

    Las comunicaciones entre provincias están tan interrumpidas, que la noción de gobiernos nacionales comienza a volverse una hipnosis entre los grupos armados (ya no existe la unidad nacional, más que en la mente de los grupos armados: exnarcos, militares, seguridad privada, policías, etc…) hipnosis que deben mantener a toda costa las clases privilegiadas por su propia seguridad.

    Por ello los políticos que viven bien allí quieren aprovechar la oleada fanatizadora de la gente para aumentar su apoyo popular y poder usar a la masa como escudo contra posibles agresiones de los grupos armados.

    Más la gente no apoya a los políticos y los acusan de lo que siempre los hemos acusado: de mentirosos, hipócritas, ladrones y oportunistas.

    Es por aquellos meses que las comunicaciones y el comercio a gran escala estarán interrumpidos, sin electricidad ni transporte, y por lo tanto el poder financiero de los banqueros desaparece, ya no hay cifras gigantescas en pantallas que demuestren que son millonarios ni pueden pagar con dinero fantasma en computadoras. También la noción de gobiernos nacionales comienza a esfumarse de la mente cada vez menos hipnotizada de los grupos armados.

    Por ello estos hombres cada vez más lúcidos de que la situación anterior ya no volverá hacen una alianza con los líderes religiosos para apoderarse de los bienes REALES que trajeron consigo las clases privilegiadas.

    Así que el clero, cada vez más poderoso, incita y enardece a la nueva clase campesina, tan fanatizada y desesperada, primero contra los políticos.

    Los campesinos incitados linchan a los políticos, que son una ínfima parte de la población de esas nuevas zonas de cultivo. Pero esto no soluciona nada para el sector campesino.

    La primera ola de linchamientos desata una segunda: matan a las clases privilegiadas, mientras que el clero y el ejército, la nueva alianza oscurantista, se reparten los beneficios y dan muy poco al pueblo.

    La tercera ola de linchamientos se incita para acabar con cualquier voz disidente: primero los pocos homosexuales declarados que viven allí, después los ateos, después los pocos demócratas (los que se oponen a estos nuevos regímenes) y por último a las minorías religiosas (protestantes en zonas de predominancia catílica, católicos en zonas de predominio protestante, musulmanes, algún budista, etc…)

(Que no diera por vivir en aquellos hermosos viejos tiempos donde todo era perfecto y mejor, con buenos valores...)

    A estas alturas, de los muertos de toda una generación exterminada ya sólo quedan los huesos dispersos, secos, mientras que la peste disminuye progresivamente, dando paso a un nuevo mundo Neo-Oscurantista, el sueño dorado de los conservadores: un mundo sin el terrible estado laico ni la vida secular, un mundo sin gays declarados, sin ateos abiertamente, sin la terrible democracia, ni la filosofía tan peligrosa: un mundo como el de antaño: UN MUNDO FELIZ.

    Pronto haré una tercera parte paradescribir ese hermoso mundo del futuro.

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Un mundo piadoso.

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  El fin de la “era del petróleo” 

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SECCIONES a las que pertenece este artículo: Agonía de la civilización actual.

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