Palabras clave: clásicos, clásicos de
la literatura, clásicos de la literatura universal, La Leyenda de Gilgamesh, La
epopeya de Gilgamesh, Literatura Sumeria, Literatura Acadia, Literatura
Babilonia, Literatura Amorrea, Literatura de Mesopotamia, Literatura del Medio
Oriente, Literatura antigua, origen del libro del Génesis, “el Génesis es
plagio de libros sumerios”, “el génesis es plagio”.
“Cuando llegaron,
estaban parados allí, maravillados de la vista del bosque, observando la altura
de los cedros y la magnificencia del bosque. Entonces buscaron a Huwawa
rastreando sus huellas en los caminos ordenados.
En su búsqueda encontraron
el Mashukur (“El monte del cedro”), hogar de los Dioses y trono de las Diosas,
que en la faz de la tierra no hay otro igual en abundancia. Dulce y placentera
les fue su sombra, aunque se enredaron en la maleza Espinosa del espeso follaje
del bosque, pues los cedros y los pinos estaban tan intrincados que no había
manera de desenredarse de ellos.
Por ello Gilgamesh y
Enkidu cortaron muchos cedros con sus hachas, y muchos cipreses, como para
llenar dos terceras partes de un palacio. Al cedro le sacaron muchos grumos de
la altura de sesenta codos, resina exudada como si la hubiera llovido.
Una vez cortados los
árboles, pudieron subir libremente por el monte: pero entonces un ave comenzó a
cantar, y de inmediato las otras aves le fueron contestando una por una hasta
hacer un ruido estruendoso y constante.
Un árbol lleno de
grillos también hizo un coro de ruidos, como una canción que por el tronco
hueco del árbol emitió el fuerte sonido de la canción. Una paloma en la madera
gimió, y una tórtola le respondió. Entonces la cigüeña hizo una llamada,
alegrando al bosque con el ruido, junto al francolín. Hasta los monos cantaron
en voz alta con chillidos simiescos:
Sonó pues el bosque como
una banda de músicos y tamborileros, que llevaron el mensaje de la llegada de
intrusos hasta la presencia de Huwawa. Entonces los pasos de Huwawa hicieron
templar el bosque, y como la sombra del cedro, así cayó el terror en Gilgamesh,
quien rígido apretó sus brazos y sus piernas empezaron a flaquear y temblar…”
El fragmento anterior pertenece a la
edición de QUID del libro “Gilgamesh: el hombre que lo vio todo.” Esta edición
de la leyenda épica de Gilgamesh, de Editorial Quinta ID entidad, también
llamada QUID Editorial (https://quideditorial.blogspot.mx)
fue hecha para la nueva sección “Clásicos de la Literatura Universal” dentro de
la sección “Literatura”.
Podemos afirmar basándonos en la abrumadora evidencia, de que la leyenda de Gilgamesh, junto con la historia de Ziusudra-Utnapishtim fue una influencia decisiva en los relatos del Diluvio y de Nimrod del Génesis, y una influencia sumamente importante en ese mismo libro de mitología Judía.
Ha llegado hasta mí, Zendir Haidar, este texto, fruto de la labor traductora de innumerables arqueólogos, historiadores y literatos, para que luego, al traducirla al Español desde una publicación de la Society of Antiquaries of London (https://www.sal.org.uk/), la hago llegar hasta ti, estimado lector, con un estilo y sabor clásicos, distintivo este de QUID Editorial, para que la disfrutes:
Artículos relacionados:
Clásicos del Plástic-Art Universal 2: La Estela de los Buitres.
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Un abrazo zendir, muy interesante página, continuare visitando este lugar como un habitual de momentos de búsqueda de todo y nada
ResponderEliminarGracias amigo, espero que te guste la página y los libros publicados de nuestra editorial. El de "Cultura, cultivos y jardines" incluye varios cuentos, a ver que te parece. Saludos
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